Cómo conservar el jitomate en casa para que no se eche a perder tan rápido: tips y trucos que te sacarán de apuros en cualquier momento
El jitomate, aunque es un alimento esencialmente veraniego, lo podemos encontrar en México en casi cualquier temporada del año. El jitomate suele ser un ingrediente súper importante y prioritario en casi todas las recetas de comida mexicana, así que no puede faltar en ningún hogar mexicano.
Lo que hacen muchas personas es comprar bastantes jitomates por kilos y kilos para que rindan y siempre los tengamos a la mano para preparar sopas, caldillo para albóndigas o alguna pasta, pero hay veces en las que nuestros jitomates se ‘hacen feos’ o se echan a perder antes de que podamos siquiera pensar qué hacer con ellos. Para esta y otras eventualidades, el día de hoy aprenderemos a conservar el jitomate en casa.
El primer error que podemos estar cometiendo todos para que nuestros jitomates no estén durando lo suficiente es que los metemos al refrigerador apenas y llegan a casa. Para mantener un jitomate fresco es fundamental que no pierda agua (que es casi toda su composición), y el frío del refrigerador hace que las membranas internas del jitomate se rompan, así que lo mejor es no introducir esta hortaliza al refrigerador al menos hasta que esté completamente maduro.
¿Cómo conservar el jitomate en las mejores condiciones?
El punto débil del jitomate es su piel, ya que es la encargada de conservar la humedad en el interior de la hortaliza. Como todas las cosas que ha creado la naturaleza cumplen perfectamente bien su función, pero tiene un punto débil: es el lugar por el que están conectados el pedínculo (o sea, el nacimiento de dónde debería conectar al tallo) y el resto de la planta.
Por esa misma razón, para mantener el jitomate fresco durante más tiempo se recomienda conservarlos siempre con esa parte mirando hacia debajo y pegada al recipiente de vidrio o la cesta en la que debe ser conservado. Por lo tanto, nada de envolverlos en papel de periódico, meterlos en agua o en la nevera. Para preservar este producto tan solo necesitarás darle la vuelta al tomate, ayudándole así a mantener su frescura durante mucho más tiempo.
Tips para conservar adecuadamente tus jitomates
Prioriza escoger los mejores jitomates que encuentres en el mercado. Lo que se aconseja es que los encuentres en su punto óptimo de maduración, listos para su consumo inmediato y que compres sólo los que necesites en cada momento.
Sin embargo, si no vas a consumirlos el mismo día y ya están perfectamente maduros, guárdalos en el cajón especial para vegetales, en alguna canastilla o caja separada del resto de los vegetales. Procura que no se amontonen demasiado. Es importante que los guardes en el cajón, ya que tienen una temperatura menos fría que el resto del refrigerador, adecuada para mantener adecuadamente los vegetales.
Nunca refrigeres los jitomates que aún no hayan madurado del todo; si están algo verdes o demasiado duros, déjalos a temperatura ambiente, en un lugar fresco alejado de fuentes de calor y de la luz directa del sol, y sin amontonar en exceso. Vigílalos bien, porque pueden sobre madurar muy rápido.
Hay que recordar que el pedínculo es la parte más frágil de la hortaliza, por eso es importante acomodarlos viendo hacia la parte de abajo, con el pedínculo ‘mirando’ hacia el recipiente en el que vas a conservarlo.
En caso de que tenga restos de pedínculo, es decir, las hojas verdes de la hortaliza, es importante quitarlas, favorecerás así su conservación.
La especialista en gestión culinaria J. Kenji López aconsejó que para mantener los jitomates en condiciones adecuadas por más tiempo, se puede optar por un método alternativo para alargar la vida de los jitomates: se trata de pegar una pequeña tira de cinta micropor sobre el lugar al que el jitomate está conectada al pedínculo.
Si tienes un cargamento demasiado grande en el que sabes que no los vas a poder consumir en un tiempo prudente, siempre puedes deshidratarlos o preparar salsa de jitomate y congelarla.
Siguiendo estos consejos podremos conservar nuestros jitomates de la mejor forma posible para cada ocasión. Así preservaremos su sabor, su aroma y todas sus propiedades naturales. Y de paso, evitaremos que se nos estropeen antes de poder consumirlos.
Historia de Ameyalli Roskaritz
